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Proyecto FARIS: investigación, innovación y cooperación internacional sobre el manejo de Thrips

En días pasados estuvo visitando Colombia el entomólogo PhD David Teulon, quien es investigador del Instituto Neozelandés Plant & Food Research y el director del proyecto Investigación Fundamental y Aplicada en Detección de Insectos -FARIS[1], por sus siglas en inglés. El proyecto FARIS es una investigación a gran escala sobre manejo de Thrips que se desarrolla en varios países del mundo, como por ejemplo Colombia, Nueva Zelanda, Alemania, Holanda, Suecia, Estados Unidos y Nigeria. El proyecto FARIS aborda el manejo de Thrips desde múltiples ángulos, dentro de los cuales se encuentran las trampas, capturas masivas, identificación, clasificación, estudio biológico, respuesta a hormonas, etc. y estudia posibles alianzas con miembros del sector productivo para aplicar los resultados de las investigaciones en terreno. 

La coordinadora del proyecto FARIS para Colombia es la profesora PhD Elena Luisa Margarita Brochero, quien dirige las actividades y subproyectos que para ese propósito se realizan en la Universidad Nacional de Colombia.

Gracias a la colaboración del ingeniero agrónomo Leonardo Moreno, egresado de la Universidad Nacional, conseguimos una entrevista especial con el Dr. Teulon y la Dra. Brochero, quienes muy amablemente nos atendieron en la sede académica.  

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Angélica Pardo: ¿En qué consiste el proyecto FARIS? 

David Teulon: FARIS es un proyecto sobre manejo de Thrips que desarrolla investigaciones en varios países, entre ellos Colombia. El proyecto se lleva a cabo con especialistas de diferentes áreas que visitan los países participantes y, en esa medida, aprenden unos de otros. El proyecto consiste en entender cómo los Thrips responden a diferentes ondas de luz y cómo se puede utilizar ese conocimiento para mejorar su captura dentro y fuera del invernadero, pero también para entender de qué otra forma se puede utilizar esa información. 

Angélica Pardo: ¿De modo que ustedes están interesados solo en capturarlos o también en matarlos?

David Teulon: En ambos. Una de las razones que tenemos para capturarlos es poder monitorearlos. Necesitamos saber si los insectos que atrapamos son o no Thrips, en primer lugar, y también, qué tan grande es su población en determinado lugar y qué cualidades tiene; así que para eso es que utilizamos las trampas principalmente por el momento. Pero estamos también muy interesados en aumentar la eficiencia de las trampas hasta un nivel en el que podamos reducir el número de Thrips en el cultivo (a través de las capturas masivas) para llegar a un punto de control total. 

Angélica Pardo: Usted menciona que hay muchos países participando en este proyecto. ¿Por qué Colombia es uno de ellos?

David Teulon: Colombia tiene un problema de Thrips, un problema que tienen también muchos otros países que exportan flores. Esta es una de las razones. Además, hay investigadores colombianos que están interesados en este problema, y esto también es muy importante para nosotros. Por otra parte, Colombia tiene unas características ambientales únicas, como un clima temperado durante todo el año, lo que es muy inusual. La mayoría de los demás participantes del proyecto pertenecen a países estacionales, así que Colombia constituye una excelente oportunidad de estudio. 

Elena Brochero: Adicionalmente, porque en Colombia estamos exportando Frankliniella Panamensis en las frutas y las flores. Sabemos que además de la Frankliniella Occidentalis, los países importadores ya tienen algo de Frankliniella Panamensis. Por eso se necesita saber más sobre estas especies, porque representan un gran riesgo. La idea es entender más sobre la biología y la ecología de Frankliniella panamensis, pues tienen importancia en el mundo floricultor, pero no hay estudios sobre ello. Además, si uno revisa qué datos tenemos sobre los Thrips, se da cuenta de que la información es muy vieja, que data de los años 90’s y que la más reciente es del año 2000. Esto es increíble, pues somos el segundo país exportador de flores en el mundo y no tenemos información sobre esto. Cuando participamos en estos grupos internacionales y nos preguntan por nuestras investigaciones sobre Thrips en general, es muy poco grato para mí decir que tenemos muy poca información y que toda ella está en español, un idioma que ellos no leen. También tenemos algunos problemas porque en Colombia no se escribe correctamente la palabra Thrips. En vez de Thrips, escribimos trips y por eso cuando se busca información en internet los resultados que arroja el buscador son sitios como despegar.comkayak.com o atrapalo.com. Por eso en la literatura internacional que hay sobre Thrips, no se encuentra nada en relación con Colombia. Creo que es importante crear una línea base para tomar mejores decisiones aquí, así como para enseñar, crear grupos de investigación y también tener una mejor posición en grupos internacionales. 

Angélica Pardo: Esta mañana estuvimos haciendo una entrevista a la directora de producción de una finca de crisantemos. Le preguntamos cuál era el mayor problema del cultivo y ella nos respondió que el principal problema son los Thrips. ¿Cuál podría ser una aplicación más concreta del proyecto FARIS en flores?

David Teulon: El control de Thrips sin usar tantos pesticidas. Concretamente, con el uso de trampas en diferentes formas, con nuevas luces, luces LED quizá, nuevos semioquímicos y agentes de control biológico. En un buen número de países importadores de flores se prefiere que las flores no contengan demasiados pesticidas. Creo que el objetivo último de la investigación es el desarrollo de nuevas tecnologías -tecnologías suaves- capaces de remplazar los insecticidas. 

Angélica Pardo: ¿Pero la investigación es solo en flores o también en otros cultivos?

David Teulon: En Colombia nos concentraremos en flores principalmente. Otros participantes están haciendo investigación más básica en laboratorio, utilizando equipos especializados. En Alemania, por ejemplo, se está trabajando en cultivos de vegetales. 

Elena Brochero: La meta final es obtener un paquete para capturas masivas que incluya mecanismos pasivos y activos, semioquímicos y control biológico. Paralelamente estamos definiendo unos protocolos, porque cada compañía tiene su propio protocolo y por esto no es posible comparar los datos de diferentes compañías o de diferentes invernaderos. Es por esto que aunque se invierte mucho tiempo, dinero y energía en algo, cuando regresamos para revisar esta información, no podemos usarla para hacer predicciones o para diseñar un modelo que permita tomar mejores decisiones. Las compañías invierten mucho, pero cuando uno trata de leer la información que se extrae, no es útil en absoluto para la toma de decisiones. Así que paralelamente a este proyecto, la idea es invitar a los productores a crear mejores protocolos para sistematizar la información y que se pueda usar en el futuro. Hemos trabajado usando el método de compartir el conocimiento, por lo que las compañías también son investigadoras. Ellas tienen conocimiento que nosotros no tenemos y viceversa. Es un buen trato poner todo esto sobre la mesa y analizar desde diferentes puntos de vista cuál es la mejor forma de utilizar este conocimiento.    

Elena Brochero y Angélica María Pardo.

Angélica Pardo: Me pregunto si lo que ustedes quieren hacer es algo que sea válido en muchos campos diferentes. ¿Su objetivo es hacer una investigación global?

David Teulon: Parte del concepto ha estado enfocado en la capacidad de atracción de los semioquímicos. Las trampas que se usan hoy son prácticamente las mismas que se usaban hace 40 o 50 años. Cuando decidimos cómo íbamos a trabajar juntos, vimos que hay nueva tecnología, la de las luces LED, con la cual se pueden ver ondas de luz específicas –no solo el color- lo que permite desarrollar unas trampas mucho más efectivas que las de antes. 

Elena Brochero: Además, como se trata de un grupo transdisciplinario, cada país y cada experto tiene diferentes experiencias y diferentes puntos de vista que podemos compartir. Por ejemplo, la Universidad de Lund en Suecia es experta en visión; ellos pueden ayudar mucho en el conocimiento básico sobre la visión de los insectos. Nueva Zelanda es experta en ecología y en los Países Bajos tienen buenas formas de control de acuerdo con varios estudios. Esa es la idea, actualizarse sobre lo que está pasando con los Thrips alrededor del mundo y saber qué vacíos se necesitan llenar con nuevo conocimiento, pues el problema de los Thrips está en todas partes.

David Teulon: Sí. Los Thrips son un problema en todas partes. Algunas de las respuestas a nuestras preguntas serían útiles en todas partes… 

Elena Brochero: Es verdad, Podemos utilizar este conocimiento también para otras plagas como la mosca, y en diferentes tipos de cultivo. Por ejemplo, en Colombia tenemos problemas de Thrips también en frutales. Esto es un modelo, y escogimos este modelo porque los Thrips son insectos increíbles… tienen muy pocos omatidios, alrededor de 60 omatidios.

Angélica Pardo: ¿Qué son omatidios?

Elena Brochero: Los Thrips tienen ojos compuestos. Cada parte (unidad) del ojo se llama omatidio. Los Thrips tienen solamente alrededor de 60 omatidios, mientras que una mosca doméstica tiene miles de omatidios. A pesar de esto pensamos que los Thrips pueden ver bastante bien. Pueden responder muy positivamente a los colores. Y también, a pesar de que tienen muy pocos pelos pueden responder muy rápido y fácilmente a los compuestos sencillos como los semioquímicos. Entonces es un muy buen modelo. Podemos poner este conocimiento al servicio de la floricultura. 

Sabemos que los floricultores usan trampas de adhesión. Se encuentran azules, amarillas y blancas. En mi experiencia, he encontrado que ellos no utilizan la información que sale de esto para tomar decisiones. Simplemente ponen las trampas porque el ICA lo requiere, pero no entienden si esta medida es para hacer monitoreo o capturas masivas, cosas muy diferentes. Así que tenemos una buena oportunidad porque ellos ya usan estas trampas, aunque tenemos un reto grande que consiste en mejorar la información que se recibe a través de ellas. Queremos incluir otro tipo de conocimiento sobre luces LED.

Angélica Pardo: ¿Están ustedes investigando en alguna finca en particular de la Sabana de Bogotá? ¿Están teniendo suficiente acceso a la información?

Elena Brochero: Nuestro grupo ha estado trabajando en dos fincas comerciales. Actualmente tenemos resultados de esta aproximación con uso de trampas adhesivas y señales ópticas en alstroemerias. Obtuvimos resultados muy interesantes. El estudio se desarrolló con la compañía exportadora más importante de Alstroemerias en Colombia, Jardines de los Andes. Adicionalmente, obtuvimos algunos resultados también en crisantemo, con el grupo Progeny. 

Angélica Pardo: ¿Cuál es la perspectiva del proyecto en el corto y mediano plazo?

David Teulon: Por el momento estamos en la fase de planeación. Tenemos varias ideas que podemos implementar integrando algunas de las herramientas que hemos mencionado. Uno de los retos, sin embargo, es encontrar recursos para hacerlo. Hay muchas oportunidades. Tenemos que ver cuáles de ellas son las más apropiadas y con base a ello, proseguir.

Angélica Pardo: ¿Quién está financiando el proyecto actualmente?

David Teulon: El Proyecto FARIS es financiado por el gobierno de Nueva Zelanda, pero solo en cuanto a los viajes. Los institutos de investigación involucrados en cada país también ayudan a financiar el proyecto. 

Elena Brochero: En la Universidad Nacional tenemos dos metas diferentes. Una es aprovechar el talento humano de nuestros estudiantes para crear grupos de investigación sobre Thrips y floricultura aquí en Colombia. La segunda es desarrollar proyectos que puedan ayudar en el día a día de la floricultura. Queremos ayudar aportando soluciones a los problemas de sanidad que el sector tiene. 

Angélica Pardo: ¿Cómo nació este proyecto?

David Teulon: Esa es una buena pregunta. Previamente teníamos una colaboración con la Red Australiano-europea de Semioquímicos para Thrips –EATS[1]. Teníamos, por lo tanto, un enfoque muy importante en semioquímicos y una variedad de participantes con experticia y habilidades diferentes. La financiación la hacían Nueva Zelanda y la Unión Europea. 

Después pensamos en cómo podíamos hacer una colaboración similar, pues la anterior experiencia había sido muy valiosa.  Encontramos muy buenos aportes de gente de diferentes partes del mundo e iniciamos este proyecto, pero haciéndole una pequeña modificación. Continuamos estudiando los Thrips pero no enfocándonos tanto en la atracción con semioquímicos sino en la parte de la óptica, de la visión. Entonces la idea era tomar los resultados en material de visión (óptica) para volver a la atracción y a la semioquímica y hacer los procesos juntos. Pensamos en qué participantes podrían colaborar en este proyecto y los escogimos de acuerdo con eso. 

Angélica Pardo: ¿Cómo está progresando el proyecto en otros países?

David Teulon: Creo que el proyecto en Alemania va bien porque los alemanes están buscando dinero para mantenerlo en marcha. En Holanda también va bien. Tenemos un estudiante de doctorado en Nueva Zelanda y otro en Holanda analizando los aspectos fundamentales de la visión de los Thrips.

En Suecia es un poquito diferente porque allí hay un entendimiento fundamental de la visión de los Thrips en el marco de un programa que es mucho más académico, pura ciencia. 

De modo que diferentes colaboradores están investigando cosas diferentes y utilizando metodologías diferentes y arrojando diferentes resultados, y esta es una de las virtudes de este proyecto, que abarca un gran rango de personas con diferentes tipos de experticia. 

Angélica Pardo: Muchas gracias por su tiempo, profesor Teulon y profesora Brochero. 

Angélica María Pardo y David Teulon.

[1] Fundamental and Applied Research in Insect Sensing

[2] Europe Australasian Thrips Semiochemical Network 

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