Por: Redacción Revista Metroflor
A inicios de los 90 Vicente Carrera, uno de los nombres destacados y reconocidos del mundo florícola del Ecuador, se atrevió a innovar construyendo una empresa que verdaderamente se preocupara por las necesidades de los floricultores. El objetivo era construir una compañía que fuese un referente de transparencia y honestidad, pero también de cercanía, apoyo y buen servicio al floricultor ecuatoriano.
Hoy, en el cumpleaños número 30 de este legado, podemos decir que Vicente cumplió su meta: Importagriflor cubre el 90% del sector cultivado de flores en Ecuador. La compañía ha crecido y ha cultivado éxito tras éxito gracias a un equipo muy profesional que actualmente lidera María Augusta Onofre Carrera, en calidad de gerente general de la compañía. El equipo de Redacción de Metroflor habló con Vicente y con María Augusta; he aquí lo que compartieron con nosotros:
Metroflor:
Importagriflor, con 30 años en el mercado, se consolida como una de las más importantes distribuidoras de insumos para el sector floricultor. Cuéntenos un poco sobre los inicios, sobre cómo nació la compañía.
Vicente Carrera
Hace 30 años (justamente cuando empezaba la floricultura, por los años 89, 90), yo tenía ya un reconocimiento y una buena trayectoria de servicio en el sector agrícola y quería materializar una visión de empresa. En esta coyuntura empecé a hacer lazos de amistad con floricultores, con clientes, y decidí fundar una compañía que diera un servicio integral, con compromiso hacia el sector y que pudiese atender a los floricultores personalmente y darles la asesoría técnica que necesitaban.
Así empieza Importagriflor en el año 1991, muy enfocada en atender a los primeros floricultores del país, siempre con vocación de servicio y atención para brindar las mejores soluciones. En ese entonces se empezó a trabajar en una distribución de alrededor de unas 30 casas comerciales, entre ellas nacionales como Agripac, Ecuaquímica y Farmagro y multinacionales como BASF y Bayer.
Metroflor:
¿En qué parte de este recorrido se une María Augusta?
Vicente Carrera
María Augusta ha sido parte de este equipo desde el comienzo de la compañía, pero asumió la gerencia hace 10 años. Es una mujer dedicada y con un vasto conocimiento del sector floricultor; su carácter emprendedor, riguroso y decidido, pero a la vez generoso, le ha permitido aportar en la solución de las problemáticas que se viven día a día en el campo y en el crecimiento de la compañía. Siendo la organización y la disciplina sus consignas en la administración de la empresa, ha conseguido que el personal esté armoniosamente articulado para la consecución de un fin común, que es llevar al campo las mejores soluciones y el mejor servicio.
Dentro de la trayectoria de María Augusta en la gerencia se destacan numerosos logros dentro de los cuales está la consolidación de las relaciones con proveedores y con los clientes. Se trata de un periodo de mucho crecimiento para la compañía.
Metroflor:
María Augusta, ¿Qué valores orientan las actividades de Importagriflor?
María Augusta Onofre
Desde que comenzó la compañía siempre tuvimos en mente ese compromiso con el cliente. Estamos con ellos para construir soluciones con base en sus necesidades, incluso para ser parte de las soluciones.
Nuestro lema siempre ha sido trabajar con esa actitud de pasión y de amor a lo que estamos haciendo y, de hecho, es algo que yo he transmitido a mi equipo. Eso nos ha dado un valor agregado, convirtiéndonos en esa compañía esmerada en brindar el mejor servicio al cliente con un ágil y eficiente servicio.
Estos han sido nuestros valores desde la concepción y el inicio de la compañía. Siempre transparencia, siempre honestidad, mucha seriedad y un servicio al cliente impecable. Treinta años de trayectoria no se improvisan. Si no hubiese habido transparencia, honestidad y servicio al cliente, no estaríamos contando la historia. Eso nos ha llevado a donde estamos, a podernos sostener en un mercado tan competitivo, tan difícil.
Treinta años de trayectoria no se improvisan.
María Augusta Onofre
Metroflor:
Un cliente de Importagriflor no solamente espera el producto sino un apoyo técnico, una asesoría. Cuéntenos un poco de eso… ¿Qué valor, en el aspecto técnico, le agrega Importagriflor a los servicios que presta?
María Augusta Onofre
Una oferta innovadora que se basa en alternativas amigables con el ambiente y con una excelente relación de costo/beneficio. En eso hemos estado enfocados, buscando con nuestros proveedores productos que sean muy beneficiosos para el sector, no solamente en la parte técnica, sino que también les ayuden a abaratar sus costos de producción.
Lo que estamos haciendo es llegar al cliente con productos nuevos, muchos de ellos de nutrición, de control orgánico y siempre tratando de brindarles no solamente la parte técnica, sino también que sean productos muy competitivos en precios. Esta ha sido una forma de entender las necesidades del sector, comprendiendo muy bien que uno tiene que ir siempre a la vanguardia en todos los frentes.
Metroflor:
Hoy en día, y con perspectivas hacia el futuro, ¿Cuál es el aporte de Importagriflor al sector floricultor?
María Augusta Onofre
Hace un año empezamos con una concepción diferente (“apoyo técnico en finca”) con un equipo de ingenieros que van a apoyar al floricultor en el terreno. Ahora bien, consolidar este proyecto nos tomará, quizá, unos 3 o 4 años, por lo que por ahora estamos dedicados a sacarlo adelante.
Por otro lado, iremos aumentando nuestro portafolio con productos que sean innovadores para el sector: si estás con productos a la vanguardia y con soluciones integrales, creo que ya estás armando un futuro que está relacionado con lo que el cliente requiere.
Metroflor:
Y en este gremio tan masculino, ¿Qué se siente liderar, siendo mujer, una empresa tan importante?
María Augusta Onofre
Para mí ser mujer nunca ha sido un limitante. Yo siempre he ido segura de lo que soy, segura de la compañía que me respalda, segura de todo lo que estamos haciendo.
Entonces te toca cambiar ese concepto para que las personas entiendan que el estar una mujer liderando es tener armonía e inteligencia al frente de una compañía; es orden y equilibrio en las decisiones, siempre con sabiduría, organización, visión, mucha prudencia y análisis. Es tener la intuición, ese sexto sentido que nos permite mirar riesgos y también oportunidades. Después de tantos años, creo que es de mucho respeto el que se vea a una mujer al frente de la compañía.
Y creo que no ha sido nada complicado. Cuando uno tiene claro para dónde va y sabe lo que quiere, la gente también apoya eso y te respalda.
El sector tiene futuro para muchos años porque ante situaciones adversas los floricultores han tenido esa capacidad de resiliencia para convertir las dificultades en oportunidades
María Augusta Onofre
Metroflor:
¿Qué mensaje le quiere mandar al sector floricultor ecuatoriano?
María Augusta Onofre
Quiero decirles que el sector tiene futuro para muchos años porque ante situaciones adversas los floricultores han tenido esa capacidad de resiliencia para convertir las dificultades en oportunidades: han buscado otros mercados, otros segmentos, han incluso buscado cambiar de variedades. No es un sector que se dé por vencido fácilmente: siempre ha tenido esa valentía y esas ganas.
Mientras al sector florícola le vaya bien, a nosotros, que hacemos parte de la cadena, nos va a ir bien. Por eso debo aprovechar esta oportunidad para agradecerles a nuestros clientes porque sin ellos no podríamos estar contando esta experiencia maravillosa de 30 años, que es un orgullo para nosotros porque, a pesar de todo lo que ha pasado, nos hemos podido sostener gracias a que ellos han confiado en nosotros, nos han dado la apertura y nos han dado el apoyo para seguir demostrando la capacidad de respuesta que tiene la compañía.
Este sería mi mensaje al sector, dentro de un eterno agradecimiento porque ellos son parte importante de nuestra empresa.
Como toda empresa hemos tenido altos y bajos donde nos hemos tenido que sostener fuertemente para mantener el legado de Vicente. Tuvimos momentos de bonanza cuando participamos en los años dorados de la floricultura, en donde había mejores rentabilidades y mayores expectativas, menos riesgos incluso. Pero también hemos tenido que vivir los años difíciles cuando los floricultores han sido muy golpeados.
Siempre hemos estado aquí y lo seguiremos estando para nuestros clientes.